(MPPRIJ-Prensa-26/12/11). El Gobierno Bolivariano de Venezuela en su gesto de solidaridad y cooperación con naciones o regiones, que han sufrido crisis como consecuencia de catástrofes naturales, ha mantenido una hermosa trayectoria en su haber de principios humanitarios, una vez que responde de manera inmediata a las solicitudes de urgencia emanadas por las embajadas de los países que lo requieren.
Por tal motivo, el Presidente Hugo Rafael Chávez Frías, en el año 2005 creó mediante Gaceta Oficial número 38.201, la Fuerza de Tarea Humanitaria “Simón Bolívar” como la unidad profesional, multidisciplinaria y multisectorial, activada en casos de contingencia mayor, con capacidades de actuación en diferentes escenarios, tanto a nivel nacional e internacional, en el área de la prevención y atención de desastres.
Esta unidad se encuentra al mando del Ministerio del Poder Popular para Relaciones Interiores y Justicias y está adscrita a la Dirección Nacional de Protección Civil y Administración de Desastres, integrada por 1.900 funcionarios de Protección Civil Venezuela, además de agregados transitorios pertenecientes a las direcciones estadales y municipales de Protección Civil y Administración de Desastres, Bomberos de la diferentes regiones, grupos voluntarios, efectivos de la Fuerza Armada Nacional, Especialistas de los sectores de Ambiente, Salud, Energía y Petróleo, Agricultura y Tierra, Educación, Alimentación, Obras Públicas y Vivienda; quienes arriesgan su integridad por salvar vidas.
Es importante destacar que Venezuela durante el presente 2011, ha cooperado con países y estados venezolanos en emergencia, con 130 toneladas de asistencia humanitaria, contentivas de alimentos, agua potable, medicinas, ropa, enseres, y otros artículos de necesidad, así como recurso humano capacitado en atención de desastres.
• En el pasado mes de marzo del corriente, se enviaron 15 toneladas de ayuda humanitaria a Bolivia tras fuertes precipitaciones asociadas al fenómeno meteorológico “La Niña” el cual ocasionó diversas emergencias en los departamentos de Cochabamba, La Paz, Chuquisaca, Beni, Oruro y Potosí.
• En el mismo mes, respondió al llamado mundial de Japón, despachando 19 toneladas de insumos de primera necesidad para los hermanos nipones, quienes sufrieron múltiples afectaciones por un sismo de 9 grados magnitud momento.
• Dos meses después, en julio de 2011, el Gobierno de Venezuela se suma a la ayuda humanitaria requerida por Somalia y envía 50 toneladas de ayuda en alimentos y agua, además de 5 millones de dólares, para la hambruna del país africano, a causa de la peor sequía en 60 años.
• El pasado mes de octubre Venezuela le envió 50 toneladas de insumos contentivos de agua, alimentos no perecederos, lencería y medicamentos a tres naciones de Centroamérica (Nicaragua, El Salvador y Guatemala) que se vieron afectadas por el paso de huracanes, situación tal que ocasiono perdidas humanas y materiales que lamentar.
• Culminando el año el Gobierno Bolivariano de Hugo Chávez, gestionó 10 toneladas de ayuda humanitaria para la República hermana de Haití, por lo que envió alimentos no perecederos, zapatos, agua potable, velas, frazadas y ropa, para los afectados por el cólera. Cabe destacar que miembros de la Brigada Internacional Simón Bolívar adscritos a la Fuerza Armada Nacional Bolivariana se encuentran en la isla cooperando en la reconstrucción como parte de los convenios de cooperación que mantiene Venezuela con otros países afectados por catástrofes de origen natural y antrópico. Del mismo modo, envió a territorio colombiano un Hércules C130 de la Aviación Nacional Bolivariana con cuatro bombas de succión de alta potencia para aliviar la congestión vial producto de las inundaciones que los han afectado en los últimos días, esto luego de la solicitud de ayuda requerida por parte de las autoridades de la alcaldía de Bogotá.
Finalmente, para el Director Nacional de Protección Civil y Administración de Desastres, Luis Díaz Curbelo, “el recurso humano que compone nuestras avanzadas humanitarias de Venezuela, actúa de manera imparcial, incondicional y muchas veces, de forma voluntaria, como una forma de enarbolar la bandera de la hermandad y la solidaridad; desempeñando una labor sin igual, por el bienestar mundial”.
(Prensa DNPCAD/MPPRIJ- Ninoska Vásquez S.).