- El Foro Regional de Organizaciones No Gubernamentales Internacionales de Siria advierte sobre las consecuencias humanitarias que se avecinan tras el reciente aumento del conflicto en Siria. Los socios instan a todas las partes a proteger a los civiles y garantizar la entrega inmediata, sostenida y segura de asistencia humanitaria basada en principios a quienes la necesitan.
Madrid, 4 de diciembre de 2024
Con al menos medio millón de personas desplazadas ya por la guerra en el Líbano hacia Siria, la renovada violencia en todo el país está desplazando a miles más y exacerbando una de las crisis humanitarias más graves del mundo. Desde Alepo hasta Idlib Hama, nuestros socios informan que el aumento de las hostilidades está poniendo en peligro a los civiles, impulsando el desplazamiento interno, interrumpiendo la continuidad de los servicios esenciales y obstruyendo la entrega de ayuda vital. Algunas instalaciones de oficinas han sido dañadas o destruidas, lo que afecta aún más a las operaciones.
Hasta 45 000 personas ya han sido desplazadas en las zonas de combate y las Naciones Unidas estiman que entre 200 000 y 400 000 sirios podrían verse desplazados internamente si no cesan las hostilidades. También se ha informado de importantes bajas civiles, incluidas mujeres y niños.
Todas las partes en conflicto en Siria deben respetar las reglas de la guerra. Deben tomarse precauciones para evitar daños a los civiles y a la infraestructura civil; se deben proteger los hospitales, las escuelas y los refugios, y se debe permitir la entrega segura y sin trabas de la asistencia humanitaria vital sin excepciones ni demoras.
Unos 16,7 millones de sirios necesitaban asistencia humanitaria antes del actual repunte de la violencia, incluidos más de 7 millones de desplazados internos. En una crisis plagada de riesgos de protección, la respuesta sigue siendo excesiva y lamentablemente insuficiente: menos del 30 por ciento de la financiación necesaria está disponible para los trabajadores humanitarios que ya están atravesando circunstancias excepcionalmente difíciles para llegar a los necesitados. Los acontecimientos de esta semana amenazan con llevar a Siria y a los sirios al borde del abismo, y confirman una vez más que las condiciones siguen siendo insostenibles para un retorno seguro.
Los miembros del SIRF piden:
- Un cese inmediato de las hostilidades por parte de todas las partes en el conflicto para evitar más pérdidas de vidas civiles, proteger a las comunidades ya devastadas por más de una década de guerra y evitar una catástrofe humanitaria.
- Un cese inmediato de las hostilidades por parte de todas las partes en el conflicto para evitar más pérdidas de vidas civiles, proteger a las comunidades ya devastadas por más de una década de guerra y evitar una catástrofe humanitaria.
- Adhesión al derecho internacional humanitario por todas las partes en conflicto, garantizando la protección de los civiles, la infraestructura civil y los trabajadores e instalaciones humanitarios.
- Financiación urgente y flexible para responder a las necesidades humanitarias en toda Siria, en particular para apoyar a los afectados por el aumento de las hostilidades, los 16,7 millones de sirios que ya necesitan asistencia, así como los 560.000 que han buscado refugio en Siria desde el Líbano.
- Reconocimiento de que las condiciones de Siria son inseguras para el retorno: Los gobiernos y la comunidad internacional deben reconocer que Siria sigue siendo insegura para el retorno y defender el principio de no devolución para proteger los derechos y la dignidad de los refugiados y solicitantes de asilo.