Desde la reanudación de las hostilidades en Gaza e Israel hasta la escalada del conflicto en Yemen, millones de personas civiles en Oriente Medio vuelven a quedar atrapadas en un ciclo de violencia sin fin.
Hoy, nuestros equipos ven con sus propios ojos las repercusiones en la población civil. En Gaza, las personas necesitan asistencia y atención de salud, y los rehenes deben volver a su hogar. En Yemen, las comunidades temen una vez más por su seguridad. En Siria, las recientes olas de violencia dejaron a más personas desplazadas y acrecentaron las necesidades humanitarias.
Es imperativo tomar medidas ya mismo para salvar vidas y recuperar la esperanza. Las personas civiles deben ser preservadas de los ataques. Los hospitales y la infraestructura esencial deben estar protegidos de las operaciones militares. La asistencia debe llegar a quienes la necesitan.
Todas las partes deben respetar el derecho internacional humanitario, en particular la necesidad de proteger a la población y a los bienes de carácter civil, a los trabajadores humanitarios y a los equipos de salud.
Mantenemos nuestro compromiso de seguir prestando asistencia vital y respondiendo a las necesidades urgentes de quienes padecen las peores consecuencias. Apoyamos a las comunidades más afectadas junto con nuestros socios del Movimiento Internacional de la Cruz Roja y de la Media Luna Roja, centrándonos en los servicios de salud, el acceso al agua y la reunificación familiar en Gaza, Cisjordania, Israel, Yemen y Siria.