Fuente: El Nuevo Diario
Municipios se preparan ante una posible hambruna a corto plazo
Si bien junio trajo más lluvias que mayo, estas no fueron suficientes para alcanzar las normas históricas de este mes. Por ejemplo en la región del Pacífico occidental hubo un promedio de 21 días sin lluvia.
El déficit de lluvias ha afectado el inicio del ciclo productivo y es motivo de preocupación para autoridades municipales. Tal es el caso de Ciudad Antigua en Nueva Segovia y Somotillo en Chinandega, donde hubo pérdidas de más del noventa por ciento de la producción de granos como maíz y frijoles.
En Ciudad Antigua, cerca del noventa por ciento de los productores no logró sembrar ni maíz, ni frijoles para la cosecha de primera, pero en zonas como La Magdalena 1 y 2, Apalí, El Carrizal, El Zapote, San José del Guineo y El Aradito, en el límite con el municipio de El Jícaro, habrá maíz y frijoles porque los cultivos se encuentran en óptimas condiciones.
Sin embargo, muchos de los productores de esas zonas ya habían sembrado en abril, en espera del invierno, pero perdieron todo. Al menos un diez por ciento de ellos volvió a sembrar haciendo uso de las reservas alimenticias.
PRODUCTORES SIN SALIDA
José Indalecio Romero Duarte, productor de la comunidad El Zapote, dijo que en un segundo intento logró sembrar apenas una cuarta parte de lo que tradicionalmente cultiva porque ya no tenía recursos y hasta tuvo que echar manos de las reservas que tenía para la alimentación en su casa. “Me considero con suerte porque voy a sacar al menos un poquito de maíz, otros no tendrán nada”, afirmó Romero.
Para Romero, la situación de los productores es totalmente desventajosa, ya que si acaso tienen acceso a créditos, “las cooperativas exigen las escrituras por mil córdobas que prestan y si no a cambio nos quitan el maíz y los frijoles al precio que ellos dicen, totalmente en el suelo”.
TOCARÁN PUERTAS
El alcalde de Ciudad Antigua, Henry Quiñónez Marín, se refirió al tema durante el tercer cabildo informativo realizado el sábado en la comunidad de El Zapote y dijo que si el invierno no se normaliza “estaremos frente a una catástrofe que golpeará más para el próximo año, porque “ya los pozos se están secando, el ganado se está muriendo y no tendremos la alimentación básica en nuestros hogares”.
Quiñónez dijo que están evaluando y monitoreando los efectos de la sequía con la finalidad de prepararse ante una posible hambruna a corto plazo y en ese sentido están haciendo revisiones al presupuesto municipal y tocando puertas con organismos nacionales y extranjeros para enfrentar lo que llamó “una catástrofe”.
COMUSSAN HACE DIAGNÓSTICO
La Comisión Municipal para la Soberanía, Seguridad Alimentaria y Nutricional (Comussan) en Somotillo estableció a través de un sondeo que para el ciclo agrícola 2014-2015 se establecieron 1,206 manzanas, de las cuales 1,200, es decir el 98 por ciento, se perdieron por la falta de lluvia.
Según el sondeo realizado por Eduardo Real, coordinador de Comussan, en cuatro territorios del municipio se perdieron entre el 80 y 100 por ciento de los cultivos de maíz por la escasez de agua.