El desplazamiento interno está impulsado principalmente por las restricciones a la movilidad, la extorsión, el reclutamiento forzoso y la violencia de género. Está afectando cada vez más a las zonas urbanas, especialmente a San Pedro Sula. ACNUR proporciona protección mediante la presencia en estos centros urbanos, servicios para personas retornadas y personas en movimientos mixtos a través del norte.
Las personas desplazadas por la fuerza y en riesgo de desplazamiento dentro de San Pedro Sula y sus alrededores se enfrentan a mayores riesgos de violencia y explotación. Las intervenciones de ACNUR tienen como objetivo mitigar estos riesgos ofreciendo protección y apoyo, haciendo hincapié en la importancia de contar con organizaciones locales sólidas y asistencia humanitaria en las comunidades de alto riesgo.
Se espera que la situación en San Pedro Sula evolucione con los esfuerzos continuos para fortalecer las capacidades locales y mejorar las medidas de protección para las personas en riesgo. Las iniciativas futuras se centrarán en la asistencia jurídica, el desarrollo de capacidades y la protección basada en la comunidad.
Contexto
La Oficina de Terreno de San Pedro Sula cubre partes del norte del país, trabajando en los departamentos de Atlántida, Colón, Cortes, Santa Bárbara y Yoro. La Oficina opera en 20 comunidades urbanas y rurales de alto riesgo, así como cerca de la frontera de Corinto con Guatemala. ACNUR tiene presencia consolidada en los Centros de Atención al Migrante Retornado (CAMR) en Omoa y Lima, y en el Centro de Atención para la Niñez y Familias Migrantes (CANFM) en Belén. El objetivo principal de ACNUR es atender a las personas desplazadas internamente o en riesgo de desplazamiento, a las personas retornadas y a las personas en movimientos mixtos que necesitan protección internacional.