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Guinea-Bissau

La epidemia de cólera en Guinea Bissau provoca casi 200 muertos y 12.000 personas infectadas

Médicos del Mundo colabora en la vigilancia epidemiológica, desinfección y en las acciones de sensibilización para reducir la aparición de nuevas infecciones

Se cumplen casi seis meses desde que se detectaron los primeros casos y la epidemia de cólera ha causado 198 fallecimientos y afecta ya 11.951 personas. A pesar de que en las últimas semanas la detección de nuevos casos ha descendido moderadamente, la percepción de la mayoría de las organizaciones que trabajan en la epidemia es que todavía no se puede considerar que esté bajo control. Las lluvias continúan siendo intensas lo que favorece las condiciones para la propagación de la bacteria y, sólo en los últimos tres días se han detectado más de 260 nuevos casos. Médicos del Mundo participa desde hace un mes en un dispositivo para apoyar a las autoridades locales en la vigilancia epidemiológica y en la prevención. El objetivo es evitar que la epidemia alcance las cotas de 2005 cuando el brote epidémico mató a más de 400 personas y afectó a 25.000. El equipo, que cuenta con el apoyo del Fondo de Emergencias de la ObraSocialCaja Madrid, se ha unido a la misión que la delegación portuguesa de Médicos del Mundo que trabaja en el país subsahariano desde 2005.

"El cólera es endémico en un país como Guinea Bissau que cuenta con unos de los peores indicadores de salud del mundo y en el que apenas una de cada cuatro familias dispone de letrinas", afirma desde Bissau Javier Arcos, médico coordinador del equipo. En la actualidad, el brote afecta a las once regiones del país y ante la dimensión de la epidemia y la imposibilidad de reducir el número de nuevas infecciones el Gobierno de Guinea Bissau ha solicitado ayuda internacional.

En la semana 24 de la epidemia se contabilizan ya 11.951 casos de personas infectadas y el cólera ha provocado ya 198 muertes desde que se decretó la alerta. A pesar de que el número de casos semanales ha descendido tras alcanzarse la cota más alta hace catorce días cuando se detectaron 1.369 nuevos casos, la epidemia no parece remitir. "En la semana del 13 al 19 de octubre se han reportado más de 900 casos y Bissau, la capital, aglutina el mayor número de infectados y de fallecimientos con 8.035 casos y 67 muertos", asegura Javier Arcos.

En este contexto desarrolla Médicos del Mundo su programa de apoyo a las autoridades locales en colaboración con otras agencias humanitarias presentes en la zona. Las actividades se centran en la región de Biombo donde coordinamos las labores de vigilancia epidemiológica y la formación específica en cólera de 17 técnicos de los centros de salud. Así mismo, la ONG ha enviado al país un cargamento de hipoclorito de calcio, material necesario los trabajos de fumigación y ha formado brigadas de desinfección que en tres semanas han fumigado casi el 90% de los hogares de pacientes diagnosticados de cólera. "Además - continúa el coordinador de Médicos del Mundo - llevamos a cabo campañas de educación y sensibilización e información en las escuelas y aldeas para explicar las formas de transmisión de la enfermedad y la manera de evitarla".

Precisamente, los cambios en el comportamiento y en determinados hábitos están logrando resultados "Hemos asistido a entierros en comunidades que han aprendido de los riesgos de la anterior epidemia en 2005. En algunas aldeas se velaba el cadáver del fallecido a causa del cólera durante varios días, sin tomar medidas de higiene específicas lo que implicaba un riesgo muy alto por la alta transmisión de la enfermedad en estas situaciones. En esta ocasión, las brigadas de desinfección acudieron a la comunidad donde se encontraba seis horas después de que un familiar acudiera al centro para comunicar el fallecimiento. El cuerpo fue correctamente desinfectado, sin oposición alguna y con el beneplácito y aprobación del jefe del clan. No se pudo evitar su fallecimiento pero sí que el cuerpo fuera una fuente de contagio", explicar Javier Arcos.

Sin agua potable ni saneamiento

Guinea Bissau es uno de los países más pequeños y también más pobres del África continental y de todo el mundo. En el último informe del Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD), Guinea Bissau ocupa el puesto 175 de 177 países en el Índice de Desarrollo Humano. El país tiene una de las peores coberturas de servicios de agua y saneamiento y en las áreas rurales menos de la mitad de la población tiene acceso a agua potable. En la temporada de lluvias, que se prolonga desde mayo a octubre, se incrementa el riesgo de aparición de brotes epidémicos como sucedió en mayo cuando se detectaron los primeros 40 casos.

El cólera es una infección intestinal aguda causada por la ingestión de alimentos o agua contaminados por la bacteria Vibriocholerae. Durante una epidemia, las heces de una persona afectada suelen ser la fuente de contagio. La enfermedad se disemina rápidamente en zonas con tratamiento deficiente del agua potable y sin alcantarillado. El contacto casual con una persona enferma no supone riesgo de contraer la enfermedad.

El periodo de incubación es corto, entre 24 horas y cinco días, y la bacteria produce una toxina en el intestino causante de diarreas y que puede conducir a una deshidratación grave y a la muerte si no se trata con urgencia. La mayor parte de los pacientes sufre vómitos que se contrarrestan con la administración inmediata de sales de rehidratación que permiten curar al 99% de los afectados. Los antibióticos (tetraciclina y doxiciclina) disminuyen la duración de la diarrea y acortan el periodo en el que se expulsan las bacterias. Desde 1995, más del 80% de los casos de cólera notificadas cada año tienen lugar en África Subsahariana.