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El Salvador

El Salvador: Necesidades Humanitarias y Plan de Respuesta 2025 – Resumen

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Necesidades humanitarias

El Salvador se enfrenta a una crisis humanitaria caracterizada por amenazas combinadas de fenómenos meteorológicos extremos, movilidad humana e inseguridad alimentaria persistente, agravada por las presiones económicas mundiales y el aumento de la inflación.

El análisis humanitario se centró en los principales factores de choque (eventos inducidos por el clima y movilidad humana) y refleja una reducción en el número de personas que necesitan asistencia en comparación con el año pasado, con 818.700 personas identificadas para el Ciclo del Programa Humanitario 2025.

La vulnerabilidad del país a las perturbaciones provocadas por el clima sigue siendo alta. La transición de El Niño a La Niña ha dado lugar a patrones climáticos erráticos, con una grave sequía en 2023 seguida de intensas lluvias en 2024, lo que ha hecho subir las tasas de inseguridad alimentaria. Actualmente, el 0,9% de los hogares se enfrentan a una grave escasez de alimentos, y muchos otros padecen inseguridad alimentaria moderada. Estos cambios ambientales no solo reducen el rendimiento de los cultivos, sino que también ejercen presión sobre las comunidades rurales que dependen de la agricultura para sobrevivir y que ahora se ven agobiadas por el aumento del costo de vida impulsado por la inflación.

La movilidad humana es otro de los principales impulsores de las necesidades humanitarias en El Salvador. Como país de origen y tránsito de migrantes, El Salvador ha visto partir a miles de personas en busca de estabilidad económica y mejores condiciones de vida. Solo de enero a agosto de 2024, funcionarios de fronteras de EE.UU. encontraron a más de 30.000 salvadoreños en su frontera sur, muchos de ellos familias y menores no acompañados. Los retornos también han aumentado, con un incremento del 35,8% en comparación con el mismo período de 2023, lo que añade presión a las comunidades que ya luchan contra la pobreza y los servicios sociales limitados. Esta alta movilidad ha dejado a alrededor de 95.000 menores sin uno o ambos progenitores, deteriorando aún más un tejido social ya debilitado por la pobreza y la escasez de recursos.

Plan de respuesta para 2025

En 2025, la comunidad humanitaria tiene como objetivo ayudar a 407.500 de las personas más vulnerables de El Salvador, alrededor del 49% de las personas en necesidad, para lo que se necesitarán 66,9 millones de dólares. El número de personas en necesidad ha disminuido ligeramente desde 2024 debido a un análisis priorizado de los municipios y a los impactos más leves de lo esperado de la sequía inducida por El Niño. Sin embargo, los servicios de protección para las comunidades afectadas por la movilidad humana siguen siendo críticos.

El Plan de Respuesta Humanitaria se basa en los choques identificados colectivamente que impulsan las necesidades humanitarias: la movilidad humana y las condiciones meteorológicas adversas. Las actividades previstas proporcionarán una respuesta intersectorial, dando prioridad a las personas en situación de inseguridad alimentaria y a las comunidades con necesidades continuas de protección.

Las actividades de respuesta están diseñadas para complementar los proyectos de desarrollo y los esfuerzos gubernamentales en curso en el país.

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