Latinoamérica y El Caribe Resumen de Situación Semanal al 28 de marzo 2025

CIFRAS CLAVE

• 500K personas afectadas por un gran derrame de petróleo en Ecuador
• 378K familias afectadas por fuertes lluvias e inundaciones en Bolivia
• 59K personas afectadas por el conflicto armado en Cauca, Colombia, en lo que va de 2025

ECUADOR: DERRAME DE PETRÓLEO

Continúan los esfuerzos de respuesta tras el derrame de petróleo del 13 de marzo en la provincia de Esmeraldas, que ha afectado a unas 500.000 personas con escasez de agua, riesgos para la salud y pérdidas económicas en la pesca y el turismo. El derrame, que liberó más de 25.000 barriles de petróleo crudo a lo largo de 86 km, ha contaminado fuentes de agua clave y zonas costeras, provocando enfermedades respiratorias y exposición a tóxicos. El gobierno ha declarado el estado de emergencia, pero persisten brechas en el acceso al agua, los servicios de salud y los medios de subsistencia, exacerbadas por las lluvias torrenciales y los problemas de seguridad relacionados con el crimen organizado. IFRC ha lanzado un llamamiento de emergencia por 4,5 millones de dólares, mientras que UNDAC, la Unidad Conjunta para el Medio Ambiente (JEU) y los socios humanitarios están llevando a cabo evaluaciones rápidas y coordinando los esfuerzos de socorro. A pesar de los esfuerzos de contención y remediación por parte de EP PETROECUADOR, las tensiones políticas locales y la inseguridad complican aún más las operaciones de respuesta.

BOLIVIA: LLUVIAS INTENSAS

El 26 de marzo, el gobierno boliviano declaró oficialmente el estado de emergencia nacional tras semanas de lluvias torrenciales e inundaciones. Desde principios de año, el mal tiempo ha afectado a 378.885 familias en 209 municipios de los nueve departamentos, dejando 51 víctimas mortales, 2.596 viviendas afectadas, 818 destruidas y un impacto significativo en los cultivos, la infraestructura y las instalaciones educativas. El presidente Luis Arce enfatizó que esta es la temporada de lluvias más extrema que ha vivido el país en 40 años y anunció la activación de mecanismos de emergencia para permitir el financiamiento externo, la agilización de las compras y la movilización de recursos a las zonas afectadas.

COLOMBIA: CONFLICTO ARMADO

La crisis humanitaria en Cauca (Colombia) sigue siendo crítica tras la escalada de acciones armadas desde octubre de 2024. Solo esta semana, el conflicto armado afectó al menos a 1.700 personas en 11 municipios, deteriorando aún más las condiciones de seguridad y protección para las 59.300 personas afectadas en lo que va de 2025. Desde el 26 de marzo, un grupo armado no estatal ha intensificado sus ataques, detonando artefactos explosivos en áreas urbanas, dejando 64 civiles heridos, incluidos seis niños. En Suárez, artefactos explosivos improvisados (IED) lanzados por drones impactaron cerca del hospital municipal. Cauca representa el 46% de los incidentes con artefactos explosivos en Colombia este año. Las comunidades indígenas del norte del Cauca también se enfrentan a restricciones de movilidad, con viviendas dañadas y carreteras bloqueadas por municiones sin detonar. Estos ataques indiscriminados violan el Derecho Internacional Humanitario y empeoran las necesidades humanitarias. Al menos nueve misiones humanitarias fueron suspendidas, mientras que 1.237 niños, niñas y adolescentes han visto interrumpidas sus actividades escolares. Las interrupciones en las comunicaciones sugieren cifras aún más altas. Las amenazas a la seguridad también han obligado a suspender la ayuda en Nariño y el Valle del Cauca.

HAITÍ: CÓLERA

Haití se enfrenta a una creciente amenaza de cólera, con al menos 975 casos sospechosos y 15 muertes registradas en 2025, principalmente en las zonas más empobrecidas y afectadas por la violencia de Puerto Príncipe. La reciente violencia armada ha desplazado a más de 65.000 personas, que se suman a las 250.000 que ya buscan refugio en sitios superpoblados con deficientes condiciones de agua y saneamiento. El 20 de marzo se confirmaron casos de cólera en al menos tres sitios de personas desplazadas, lo que hace temer un brote rápido, especialmente con el inicio de la temporada de lluvias. Las organizaciones humanitarias y médicas piden urgentemente más recursos para contener la propagación y prevenir una crisis sanitaria mayor en medio del empeoramiento de la situación humanitaria.