Representantes de Haití y República Dominicana se reúnen en Santo Domingo para reforzar estrategias contra la epidemia
Santo Domingo, 3 de mayo de 2011 - El tratamiento de los desechos sólidos y el manejo del agua siguen siendo las principales preocupaciones de las instituciones y organizaciones que trabajan en la lucha contra el cólera tanto en Haití, como en República Dominicana. Y es que, aunque la población tiene conocimiento de la enfermedad y cómo enfrentarla, el tema sanitario sigue dependiendo de la inversión en plantas de tratamiento de aguas residuales y del acceso al agua.
“El trabajo en cierta manera ha dado sus frutos, pero todavía hay muchos desafíos, sobre todo en lo que tiene que ver en el tratamiento de agua y saneamiento en especial la zona rural, donde actualmente se encuentran los casos de cólera”, expresó Jocelyne Pierre Louis, del Ministerio de Salud Pública Haití, en el inicio de una reunión de tres días, para compartir experiencias en la respuesta a la epidemia de cólera en la isla.
Luego de seis meses de declararse la epidemia de cólera en Haití, se reunieron en Santo Domingo, los días 26, 27 y 28 de abril, representantes de los Ministerios de Salud de Haití y República Dominicana, la Organización Panamericana de la Salud (OPS), el Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF) y miembros de la Brigada Médica Cubana en Haití, y otros invitados especiales.
En las conclusiones de la actividad se destacó la necesidad de un mayor esfuerzo en el saneamiento de las comunidades, el tratamiento del agua, en especial en las zonas donde se ha registrado el mayor número de casos en ambos países.
Se explicó el papel que juegan los medios de comunicación en la concienciación de las personas, ante el peligro de contraer la enfermedad y que la lucha contra el cólera apenas inicia, por lo que se deben incrementar las medidas sanitarias en ambos países.
“Haití tiene limitaciones en la capacidad de organización, afortunadamente hemos tenido el apoyo de países vecinos, en especial República Dominicana, a lo que hay que agregar la fuerte voluntad política del gobierno de Haití, la disponibilidad de los trabajadores de salud y los socios del área de salud en territorio haitiano. Como ustedes saben, compartimos un mismo espacio geográfico, por lo que lo que pasa en un territorio repercute en el otro”, resaltó Pierre Louis.
La representante de UNICEF en República Dominicana, María Jesús Conde Zabala, garantizó que la institución continuará “apoyando al Ministerio de Salud en el plan de lucha contra el cólera, en planes y acciones de agua y saneamiento de comunicación y movilización social, suministrando sales de hidratación oral en las zonas de fronteras y seguiremos disponibles para cuantas acciones hagan falta”.
Ponderó que, a pesar de las previsiones que se hicieron de que al finalizar el año 2010, el país iba a tener unos 20 mil casos detectados y no se sabía cuál iba a ser el número de víctimas, “la apuesta decidida por el Ministerio de Salud, liderado por el doctor Bautista Rojas Gómez, ha permitido que hoy veamos que las cifras no tienen nada que ver con esas previsiones y que todavía tenemos que estar alerta, tenemos motivos para ver que somos capaces de que podemos hacer las cosas bien y de salvar la vida de hombres, mujeres, niños y niñas”.
El ministro de Salud de República Dominicana, Bautista Rojas Gómez, indicó la necesidad de mantener la cooperación entre ambas naciones, generar la conciencia necesaria de que las fronteras son políticas, no epidemiológicas, al destacar que “lo que pase en República Dominicana en materia sanitaria pasará en Haití, y viceversa”.
“Es de mucho valor para República Dominicana lograr compartir con la República de Haití y con el pueblo solidario de Cuba y con las agencias de cooperación la experiencia que hemos tenido en estos seis meses”, dijo.
Según el director general de Salud Ambiental, del Ministerio de Salud Pública en República Dominicana, Luís Feliz Roa, el 90 por ciento de los dominicanos tienen ya conocimiento del cólera y toma medidas preventivas al respecto.
Feliz Roa dijo que se cuenta en la actualidad con 55 plantas de tratamiento de aguas residuales para 155 municipios del país, pero hay un 5 por ciento de estas plantas que no funciona correctamente. “Se impone la educación a la población sobre el manejo de aguas residuales. Es un problema latente y en el que se debe trabajar fuertemente”, señaló.
En el encuentro, Roa contestó a la inquietud de los participantes sobre el control de la calidad del cloro utilizado en las comunidades, e informó que se están produciendo 100 galones de cloro al día, que se monitorea la producción y el uso de éste en la prevención de la expansión de la enfermedad. “En estos momentos se implementan sistemas de abastecimiento de agua en hospitales con apoyo de UNICEF, en especial en hospitales de la frontera con Haití”, explicó sobre el trabajo que realizan las diversas instituciones que han unido sus esfuerzos en la lucha contra el cólera.
Cólera en La Hispaniola En octubre del año 2010, en la comunidad de Mirebalais, en Haití, Brigadas Médicas Cubanas notificaron la ocurrencia de inusuales casos de diarrea acuosa aguda, que producía cuadros de intensa deshidratación y muerte en los pacientes.
El 22 de ese mes se confirmó que se trataba del Vibrio cólera, y ya se reportaban casos en diversas comunidades del valle del río Artibonite. Desde hacía más de 100 años no se registraban casos de cólera en la isla La Española.
Hasta el mes de marzo de 2011 se reportaron más de 250 mil casos y cerca de cinco mil defunciones en Haití.
En República Dominicana, donde se registró el primer caso en noviembre de 2010, hasta marzo de este año se habían reportado dos mil casos sospechosos, de los cuales se han confirmado cerca de 600 casos de cólera y han fallecido 10 personas.