Concluye sexto ciclo de los diálogos
Se afirma que ya se concretaron los primeros acuerdos sobre el tema de tierras.
En medio de un enrarecido ambiente, en el que el presidente Juan Manuel Santos advierte que si no hay avances en la negociación de paz en La Habana el Gobierno se levantará de la mesa, y las Farc, por su parte, le solicitan que no patee la mesa de diálogo, concluye el sexto ciclo de discusiones. Pero más allá de ese tire y afloje, habitual en un proceso de este tipo, al parecer los avances que se han logrado sobre el tema de la política de tierras y desarrollo rural van por buen camino.
Esto forma parte de los escenarios del diálogo. En los micrófonos el careo, en el escenario militar el combate, sin que el Gobierno contemple la posibilidad de una tregua, y en Colombia quienes apoyan la negociación y sus contradictores. Pero en La Habana, como lo dijo el presidente Santos desde un principio, se establecen los acuerdos.
Hoy, cuando se cumple la sexta etapa, cada una de las misiones se tomará un tiempo para reflexionar y mirar avances. Las noticias, según se ha conocido, son buenas: ya hay un documento base, redactado entre los dos equipos negociadores, de cerca de cinco páginas en las que se ha llegado a acuerdos. Además, se dice que si las cosas continúan con ese ritmo, en junio ya habría sido evacuado este primer tema de la agenda.
Ayer, Ricardo Téllez, alias Rodrigo Granda, miembro del equipo negociador de la guerrilla, manifestó el compromiso de su grupo: “El hecho de que las Farc estén aquí en La Habana tratando el tema de la paz es un paso gigantesco para nuestro país, y nos la estamos jugando y nos la vamos a jugar por la paz, de eso no quepa la menor duda”.
El vicepresidente, Angelino Garzón, también expresó votos de buena voluntad en el proceso de paz. Confiado en que la negociación saldrá bien, planteó la necesidad de iniciar un proceso serio de reconciliación que tardará “más de una generación”.
Así, entre declaraciones, algunas descalificaciones y otras manifestaciones de voluntad de buscar la paz, avanza la negociación entre Gobierno y Farc. Pero lo que es claro, más allá de los micrófonos, es que la última palabra la tienen los negociadores de La Habana.