Cruz Roja ha distribuido ayuda humanitaria a más de 12.000 familias y redobla sus esfuerzos ante la llegada del invierno con novedosa tarjeta para la reconstrucción.
El 27 de febrero, Chile sufrió el impacto de uno de los terremotos de mayor potencia registrados en la historia y de un tsunami que devastó buena parte de la zona costera del país, dejando a su paso 521 muertos y 30 mil millones de dólares en pérdidas materiales.
Tres meses después, Cruz Roja Chilena con el apoyo de la Federación Internacional de Sociedades de la Cruz Roja y de la Media Luna Roja está finalizando la fase de socorro de su operación de respuesta a este tipo de desastres, movilizando 414.900 kilos de ayuda humanitaria (principalmente kits de higiene, carpas, kits de cocina, frazadas, cubetas y toldos) que han sido distribuidos por voluntarios de la Cruz Roja Chilena a 12.000 familias de las áreas más afectadas.
La proximidad de las bajas temperaturas del invierno significa una nueva emergencia a la que Cruz Roja debe responder. Hasta el momento, 1.600 familias se han beneficiado con alojamientos temporales y se han entregado también 600 mediaguas, en las Regiones de Maule y Bío-Bío, gracias al financiamiento bilateral de la Oficina de Ayuda Humanitaria de la Comunidad Europea y al apoyo técnico de Cruz Roja Alemana.
A la vez, la Federación Internacional contin=FAa trabajando junto a la Cruz Roja Chilena en el desarrollo de un programa de transferencia de dinero que permitirá ayudar a 8.400 familias cuyas viviendas han sido severamente dañadas, a través de una tarjeta RED cargada con un monto de dinero de alrededor de 350 dólares estadounidenses, que permitirá a los afectados hacer compras totales o parciales a través de una red chilena de ferreterías compuesta por más de 40 empresarios del sector.
"Las tarjetas RED no serán transferibles y podrán ser utilizadas =FAnicamente para la compra de materiales de construcción y/o herramientas a través de la cadena de ferreterías. Junto con cada tarjeta se entregará también un manual que proveerá consejos de uso y seguridad a los beneficiados", explica Gustavo Ramírez, representante regional de la Federación Internacional para el Cono Sur y Brasil.
Paralelamente a las soluciones de alojamiento, la Cruz Roja Chilena ha realizado un curso de formación de Equipos Nacionales de Intervención (ENI) en el área de Salud, con el apoyo de la Federación Internacional. Se planea realizar dos talleres más en junio y julio de salud en emergencias y saneamiento de agua, así como promoción de la higiene. "Nuestra meta es formar un equipo de 40 voluntarios líderes, entrenados en el área de salud en emergencias, con énfasis en el control de epidemias, que estarán activos de manera permanente en todas las filiales de Cruz Roja Chilena, a través del país", añade Ramírez.
Adicionalmente, en la región de Maule, voluntarios de Cruz Roja Chilena han recibido entrenamiento sobre el uso y equipamiento de la Unidad de Respuesta ante Emergencia, especializada en Salud dirigida por Cruz Roja Española. Esta ERU ha atendido, desde el comienzo de la emergencia, a más de 2.500 pacientes en la provincia de Hualañé. En esta región de Chile, a la vez se desarrollan campañas de educación en hábitos de higiene para prevenir enfermedades entéricas y otras propias del invierno tales como la Influenza y el AH1N1.
Durante la operación, la Federación Internacional, el Comité Internacional de la Cruz Roja y las Sociedades de la Cruz Roja de otros países, como Argentina, Canadá, Colombia, Ecuador, El Salvador, Finlandia, Alemania, Japón, Nicaragua, Noruega, Panamá, Paraguay, Perú, España, Suiza, los Estados Unidos de Norte América, así como de la Media Luna Turca han desplazado a Chile un total de 80 expertos en respuesta a desastres, como apoyo a la Cruz Roja Chilena.
Para más información o para concertar entrevistas, diríjase
En Chile: Silvia Santander, Directora Nacional de Comunicaciones, Cruz Roja Chilena Tel. 777 6038 Cel: 9 8021498