Inundaciones en Bolivia
Desde el inicio de la temporada de lluvias en noviembre de 2023, los fenómenos climáticos extremos, exacerbados por el Fenómeno del Niño y los efectos del cambio climático, han sido una constante y se han ido intensificando en Bolivia. Niveles de precipitaciones anormalmente altos han causado inundaciones, desbordes, riadas, deslizamientos y mazamorras que han afectado diversas regiones y municipios del país. Estos eventos han provocado pérdidas y daños materiales e inmateriales significativos.
El número y la intensidad de estos eventos se han incrementado notablemente durante la segunda quincena de febrero y la primera quincena de marzo de 2024, con un impacto significativo en los departamentos de Pando y La Paz. Se espera que las condiciones continúen intensificándose en la región amazónica y del chaco.